A cuatro días para que se inicie el torneo Apertura, el club Wilstermann atravesó uno de los primeros problemas internos con los jugadores por falta de pago de primas y arreglo de los contratos con algunos nacionales.
Ayer, los jugadores tuvieron su primer amago de huelga. En la mañana se presentaron a la convocatoria para el entrenamiento a las 09:30, pero no salieron a la cancha y permanecieron en el gimnasio del camarín norte del estadio Capriles a puerta cerrada, exigiendo la presencia del presidente del club, Orlando Jordán, quien no se encuentra en el país, ya que viajó a Estados Unidos con la selección, como parte de la delegación.
Aproximadamente a las 10:30 llegó el tesorero del club, Miguel Velásquez, con la finalidad de hablar con los jugadores, que no lo recibieron de muy buena manera, porque ellos pedían la presencia de Jordán y se desayunaron al saber que no se encontraba en el país.
En la mañana las negociaciones no tuvieron frutos, ya que la condición para que vuelvan a trabajar era que se solucionen todos los problemas económicos pendientes con los jugadores.
Por la tarde los jugadores llegaron al camarín norte del Félix Capriles a las 15:30, pero tampoco salieron a trabajar, sino que esperaron a los dirigentes y al ver que éstos no llegaban, trabajaron un rato en el gimnasio y luego abandonaron el lugar.
Cuando salían del escenario deportivo, llegó Velásquez y se trasladó junto a los jugadores a la sede del club, para iniciar las negociaciones sobre las primas y contratos con los jugadores que tenían cuentas pendientes.
Alrededor de las 20:30 salió humo blanco en la sede luego de las negociaciones y se logró apaciguar los ánimos de los jugadores, ya que muchos de ellos querían dejar la entidad y aseguraron que no estaban conformes con el trato que se les da.
Según informó Velásquez, se giraron cheques a todos los jugadores con los que se tenían cuentas pendientes sobre el pago de primas (en algunos casos pa rcial) que llegaban a sumar más de 19 mil dólares. En este caso se tr ataba de jugadores como Miguel Ortiz, Nicolás Raimondi, Maximiliano Andrada, Marcos Barrera (a este último fue su empresario quien le pagó la prima, y el club le devolverá).
En el caso de los jugadores nacionales que pertenecen al club Henry Machado, Amílcar Sánchez, Jair Torrico y Walter Veizaga (estos dos últimos se encuentran en Estados Unidos con la selección), Velásquez aseguró que se negociaron los incrementos salariales que solicitaron, para que finalmente puedan cobrar el sueldo de enero que no lo hicieron, porque querían el aumento primero. Según Machado, él no tenía contrato firmado para este año porque no arregló el tema económico con el club, pero, según la dirigencia, todos los jugadores tienen contratos firmados hasta 2010 y 2011.Cuarto intermedio
El otro tema que llevó al plantel a asumir la medida de presión ayer es porque existen tres jugadores que se encuentran con un pie fuera del club, pero que tienen contrato firmado. Ellos son Emanuel Reino so, el uruguayo-boliviano Juan Daniel Salaberry y el delantero boliviano Nelson Sossa.
El tesorero del club, Miguel Velásquez, quien asumió ayer la responsabilidad para solucionar este problema, logró llegar a un cuarto intermedio con los jugadores hasta que llegue el técnico Eduardo Villegas, para que sea él quien asuma cualquier determinación sobre la permanencia o no de estos jugadores en el equipo.
Sin embargo, ya existe un anuncio de algunos extranjeros que aseguran que no permitirán que los jugadores sean desafectados del equipo; caso contrario, se irían.
Ayer, los jugadores tuvieron su primer amago de huelga. En la mañana se presentaron a la convocatoria para el entrenamiento a las 09:30, pero no salieron a la cancha y permanecieron en el gimnasio del camarín norte del estadio Capriles a puerta cerrada, exigiendo la presencia del presidente del club, Orlando Jordán, quien no se encuentra en el país, ya que viajó a Estados Unidos con la selección, como parte de la delegación.
Aproximadamente a las 10:30 llegó el tesorero del club, Miguel Velásquez, con la finalidad de hablar con los jugadores, que no lo recibieron de muy buena manera, porque ellos pedían la presencia de Jordán y se desayunaron al saber que no se encontraba en el país.
En la mañana las negociaciones no tuvieron frutos, ya que la condición para que vuelvan a trabajar era que se solucionen todos los problemas económicos pendientes con los jugadores.
Por la tarde los jugadores llegaron al camarín norte del Félix Capriles a las 15:30, pero tampoco salieron a trabajar, sino que esperaron a los dirigentes y al ver que éstos no llegaban, trabajaron un rato en el gimnasio y luego abandonaron el lugar.
Cuando salían del escenario deportivo, llegó Velásquez y se trasladó junto a los jugadores a la sede del club, para iniciar las negociaciones sobre las primas y contratos con los jugadores que tenían cuentas pendientes.
Alrededor de las 20:30 salió humo blanco en la sede luego de las negociaciones y se logró apaciguar los ánimos de los jugadores, ya que muchos de ellos querían dejar la entidad y aseguraron que no estaban conformes con el trato que se les da.
Según informó Velásquez, se giraron cheques a todos los jugadores con los que se tenían cuentas pendientes sobre el pago de primas (en algunos casos pa rcial) que llegaban a sumar más de 19 mil dólares. En este caso se tr ataba de jugadores como Miguel Ortiz, Nicolás Raimondi, Maximiliano Andrada, Marcos Barrera (a este último fue su empresario quien le pagó la prima, y el club le devolverá).
En el caso de los jugadores nacionales que pertenecen al club Henry Machado, Amílcar Sánchez, Jair Torrico y Walter Veizaga (estos dos últimos se encuentran en Estados Unidos con la selección), Velásquez aseguró que se negociaron los incrementos salariales que solicitaron, para que finalmente puedan cobrar el sueldo de enero que no lo hicieron, porque querían el aumento primero. Según Machado, él no tenía contrato firmado para este año porque no arregló el tema económico con el club, pero, según la dirigencia, todos los jugadores tienen contratos firmados hasta 2010 y 2011.Cuarto intermedio
El otro tema que llevó al plantel a asumir la medida de presión ayer es porque existen tres jugadores que se encuentran con un pie fuera del club, pero que tienen contrato firmado. Ellos son Emanuel Reino so, el uruguayo-boliviano Juan Daniel Salaberry y el delantero boliviano Nelson Sossa.
El tesorero del club, Miguel Velásquez, quien asumió ayer la responsabilidad para solucionar este problema, logró llegar a un cuarto intermedio con los jugadores hasta que llegue el técnico Eduardo Villegas, para que sea él quien asuma cualquier determinación sobre la permanencia o no de estos jugadores en el equipo.
Sin embargo, ya existe un anuncio de algunos extranjeros que aseguran que no permitirán que los jugadores sean desafectados del equipo; caso contrario, se irían.
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