Los jugadores de Wilstermann fueron licenciados ayer después que la institución “aviadora” consumó su descenso de categoría la noche del jueves.
El plantel se hizo presente a las 10:00 en el camarín norte del estadio Félix Capriles, donde se reunieron con el director técnico Jorge Brandoni, quien les informó que la temporada para el plantel terminó debido a que también perdieron en los estrados judiciales.
La noticia fue comunicada por Brandoni, y no por el presidente del club Wilstermann, Víctor Hugo López, debido a que este se encuentra delicado de salud. Pero tampoco se hizo presente otro dirigente en el camarín norte.
Los jugadores recogieron sus pertenencias, dejaron vacíos los casilleros. La mayoría no volverá al camarín de la zona norte del Estadio Capriles, por lo menos la siguiente temporada, porque ya concluyeron sus contratos, mientras unos pocos, quienes están ligados a la entidad hasta el 2011, negociarán su continuidad con la dirigencia.
Las lágrimas no se dejaron esperar en varios jugadores, como Daniel Vaca, Marcos Barrera, Edgar Olivares, que al momento de pedir disculpas a la hinchada por no haber logrado que Wilstermann permaneciera en el seno del fútbol profesional, la tristeza los embargó por completo. “Éste es el peor momento de mi carrera, yo me forme y viví en Wilstermann y es muy difícil verlo así ahora”, dijo Olivares uno de los emblemas del club “aviador”.
Varios otros, como Maximiliano Andrada, Walter Veizaga, Miguel Ortiz, Félix Candia, Christian Vargas, con la voz entrecortada, agradecieron el cariño y el apoyo de la fanaticada cochabambina que los acompañó.
El director técnico Brandoni manifestó que tuvo que luchar con muchos aspectos a su llegada, no sólo el hecho de que el plantel se encontraba muy mal anímicamente, pero lo más importante, sostuvo, que el equipo estaba reducido, terminó jugando con un solo delantero.
Los últimos en irse del camarín fueron l os utileros, cuerpo médico, quienes no tenían palabras para expresar su desazón.
El plantel se hizo presente a las 10:00 en el camarín norte del estadio Félix Capriles, donde se reunieron con el director técnico Jorge Brandoni, quien les informó que la temporada para el plantel terminó debido a que también perdieron en los estrados judiciales.
La noticia fue comunicada por Brandoni, y no por el presidente del club Wilstermann, Víctor Hugo López, debido a que este se encuentra delicado de salud. Pero tampoco se hizo presente otro dirigente en el camarín norte.
Los jugadores recogieron sus pertenencias, dejaron vacíos los casilleros. La mayoría no volverá al camarín de la zona norte del Estadio Capriles, por lo menos la siguiente temporada, porque ya concluyeron sus contratos, mientras unos pocos, quienes están ligados a la entidad hasta el 2011, negociarán su continuidad con la dirigencia.
Las lágrimas no se dejaron esperar en varios jugadores, como Daniel Vaca, Marcos Barrera, Edgar Olivares, que al momento de pedir disculpas a la hinchada por no haber logrado que Wilstermann permaneciera en el seno del fútbol profesional, la tristeza los embargó por completo. “Éste es el peor momento de mi carrera, yo me forme y viví en Wilstermann y es muy difícil verlo así ahora”, dijo Olivares uno de los emblemas del club “aviador”.
Varios otros, como Maximiliano Andrada, Walter Veizaga, Miguel Ortiz, Félix Candia, Christian Vargas, con la voz entrecortada, agradecieron el cariño y el apoyo de la fanaticada cochabambina que los acompañó.
El director técnico Brandoni manifestó que tuvo que luchar con muchos aspectos a su llegada, no sólo el hecho de que el plantel se encontraba muy mal anímicamente, pero lo más importante, sostuvo, que el equipo estaba reducido, terminó jugando con un solo delantero.
Los últimos en irse del camarín fueron l os utileros, cuerpo médico, quienes no tenían palabras para expresar su desazón.
0 comentarios:
Publicar un comentario