Los volantes Walter Veizaga y Amílcar Sánchez, que aún tienen vínculos con el club Wilstermann, quieren finalizar con el nexo que los une y tener libertad de elegir a la institución que los acogerá la temporada 2011.
Veizaga debía terminar su contrato con Wilstermann en diciembre de 2010, sin embargo, a inicio de esta temporada se amplió el mismo por un año más con la condición de que el jugador tuviera un incremento salarial.
Efectivamente, Veizaga amplió su contrato por un año más, pero en el nuevo acuerdo –según el jugador– existe una cláusula en la que se señala que en caso de que Wilstermann perdiera la categoría, podría dejar la institución.
Veizaga ayer señaló que aún no pudo reunirse con la dirigencia. “No los puedo encontrar. Esperaré esta semana para resolver este detalle con el presidente, porque yo pienso hacer respetar esa cláusula del contrato”, dijo a tiempo de indicar que en caso que no logre su objetivo, se verá obligado a ini ciar las medidas que crea convenientes.
Asimismo, el jugador explicó que no debe ningún monto al club Wilstermann por derechos de formación, ya que él se formó futbolísticamente en Don Bosco y empezó a jugar con los “Aviadores” recién en 2008. Por lo tanto, Veizaga considera que por mucho que tenga 22 años, no tendría porque pagar ningún monto por “derechos de formación”.Sánchez
En el caso de Amílcar Sánchez, la situación es totalmente inversa a la de Veizaga, ya que éste finalizó su contrato con Wilstermann este año, pero como tiene 19 años y estuvo seis períodos en la institución, debe pagar derechos de formación al club “aviador”.
El jugador sostuvo ayer una reunión con el presidente de Wilstermann, Víctor Hugo López, junto con su representante (su padre) pero no se pudo definir nada en concreto.
López le explicó que al tener su contrato finalizado puede elegir el club en el que jugará en 2011, pero el equipo que lo quiera deberá negociar el porcentaje que tendrá que pagar al cuadro & ldquo;aviador” por los derechos de formación.
“No he definido nada aún, voy a esperar esta semana, aunque yo quiero irme porque la posibilidad de quedarme es complicada. El presidente me dijo que espere unos cinco días para que se concrete el acuerdo con un grupo de inversores que se harán cargo del equipo para la Copa Libertadores; entonces, voy a esperar”, dijo Sánchez tras la reunión.
Otra complicación que tiene el jugador para dejar la vinculación con Wilstermann es que el 50 por ciento de su pase le pertenece al club.
Veizaga debía terminar su contrato con Wilstermann en diciembre de 2010, sin embargo, a inicio de esta temporada se amplió el mismo por un año más con la condición de que el jugador tuviera un incremento salarial.
Efectivamente, Veizaga amplió su contrato por un año más, pero en el nuevo acuerdo –según el jugador– existe una cláusula en la que se señala que en caso de que Wilstermann perdiera la categoría, podría dejar la institución.
Veizaga ayer señaló que aún no pudo reunirse con la dirigencia. “No los puedo encontrar. Esperaré esta semana para resolver este detalle con el presidente, porque yo pienso hacer respetar esa cláusula del contrato”, dijo a tiempo de indicar que en caso que no logre su objetivo, se verá obligado a ini ciar las medidas que crea convenientes.
Asimismo, el jugador explicó que no debe ningún monto al club Wilstermann por derechos de formación, ya que él se formó futbolísticamente en Don Bosco y empezó a jugar con los “Aviadores” recién en 2008. Por lo tanto, Veizaga considera que por mucho que tenga 22 años, no tendría porque pagar ningún monto por “derechos de formación”.Sánchez
En el caso de Amílcar Sánchez, la situación es totalmente inversa a la de Veizaga, ya que éste finalizó su contrato con Wilstermann este año, pero como tiene 19 años y estuvo seis períodos en la institución, debe pagar derechos de formación al club “aviador”.
El jugador sostuvo ayer una reunión con el presidente de Wilstermann, Víctor Hugo López, junto con su representante (su padre) pero no se pudo definir nada en concreto.
López le explicó que al tener su contrato finalizado puede elegir el club en el que jugará en 2011, pero el equipo que lo quiera deberá negociar el porcentaje que tendrá que pagar al cuadro & ldquo;aviador” por los derechos de formación.
“No he definido nada aún, voy a esperar esta semana, aunque yo quiero irme porque la posibilidad de quedarme es complicada. El presidente me dijo que espere unos cinco días para que se concrete el acuerdo con un grupo de inversores que se harán cargo del equipo para la Copa Libertadores; entonces, voy a esperar”, dijo Sánchez tras la reunión.
Otra complicación que tiene el jugador para dejar la vinculación con Wilstermann es que el 50 por ciento de su pase le pertenece al club.
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