Aurora quiere ganar esta noche a Universitario, en el estadio Patria, de Sucre, en cotejo correspondiente a la decimonovena fecha del campeonato Entel, para reafirmar sus pretensiones de alcanzar el título del segundo torneo de la temporada 2011-2012.
No la tiene fácil el equipo celeste, más aún con el recuerdo fresco del partido de ida jugado ante Universitario, en el estadio Félix Capriles, el 7 de marzo, que terminó a favor del cuadro capitalino por 0 a 2, un resultado que sembró dudas en la dirigencia y la hinchada sobre el destino del equipo.
De aquella fecha hasta ahora, pasó mucha agua bajo el puente, pues la situación de Aurora en el campeonato es distinta. En aquella oportunidad el cuadro valluno apenas había cosechado ocho puntos de 24 posibles. EL celeste cochabambino ahora se ubica en el tercer lugar de la tabla con 30 puntos, está a sólo dos del ocasional puntero San José, por eso es que a la hinchada, la dirigencia, el cuerpo técnico y a los jugadores no l es parece nada descabellada la pretensión de alcanzar el título del campeonato.
Con ese objetivo, entre ceja y ceja, el equipo cochabambino asume el partido de hoy en el estadio Patria. Es que si suma las tres unidades lo mantendrían en carrera por el campeonato y le darían tranquilidad para los últimos tres cotejos del torneo, dos de ellos en condición de local, el último será ante Real Mamoré, en el Capriles.
El plantel que dirige el director técnico tarijeño Mario Rolando Ortega, llega al compromiso de Sucre incentivado por el ajustado triunfo (3-2) conseguido en la última fecha ante The Strongest, de local.
Mientras que Universitario, noveno en la tabla con 25 puntos y con pocas opciones matemáticas de lograr la corona, cayó en la Villa Imperial por 2 a 1 en el denominado “Clásico del sur” ante Real Potosí; por eso, su técnico Sergio Apaza anunció que hoy quiere reivindicarse y mejor aún ante su hinchada.
El técnico de Aurora, por su parte, confía en la explosión de Augusto Andaveris, el héroe del triunfo sobre The Strongest, el domingo último, que marcó el tercer gol a falta de cuatro minutos para el final.
Y aunque hay varios jugadores con cuatro tarjetas amarillas, Ortega ratificó que tomará en cuenta a todos porque “no hay margen para guardar nada”.
No la tiene fácil el equipo celeste, más aún con el recuerdo fresco del partido de ida jugado ante Universitario, en el estadio Félix Capriles, el 7 de marzo, que terminó a favor del cuadro capitalino por 0 a 2, un resultado que sembró dudas en la dirigencia y la hinchada sobre el destino del equipo.
De aquella fecha hasta ahora, pasó mucha agua bajo el puente, pues la situación de Aurora en el campeonato es distinta. En aquella oportunidad el cuadro valluno apenas había cosechado ocho puntos de 24 posibles. EL celeste cochabambino ahora se ubica en el tercer lugar de la tabla con 30 puntos, está a sólo dos del ocasional puntero San José, por eso es que a la hinchada, la dirigencia, el cuerpo técnico y a los jugadores no l es parece nada descabellada la pretensión de alcanzar el título del campeonato.
Con ese objetivo, entre ceja y ceja, el equipo cochabambino asume el partido de hoy en el estadio Patria. Es que si suma las tres unidades lo mantendrían en carrera por el campeonato y le darían tranquilidad para los últimos tres cotejos del torneo, dos de ellos en condición de local, el último será ante Real Mamoré, en el Capriles.
El plantel que dirige el director técnico tarijeño Mario Rolando Ortega, llega al compromiso de Sucre incentivado por el ajustado triunfo (3-2) conseguido en la última fecha ante The Strongest, de local.
Mientras que Universitario, noveno en la tabla con 25 puntos y con pocas opciones matemáticas de lograr la corona, cayó en la Villa Imperial por 2 a 1 en el denominado “Clásico del sur” ante Real Potosí; por eso, su técnico Sergio Apaza anunció que hoy quiere reivindicarse y mejor aún ante su hinchada.
El técnico de Aurora, por su parte, confía en la explosión de Augusto Andaveris, el héroe del triunfo sobre The Strongest, el domingo último, que marcó el tercer gol a falta de cuatro minutos para el final.
Y aunque hay varios jugadores con cuatro tarjetas amarillas, Ortega ratificó que tomará en cuenta a todos porque “no hay margen para guardar nada”.
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